lunes, 2 de julio de 2012

50 bromas de Grey


Sí, porque al final, de tanto oirlo, una decidió leerse 50 sombras de Grey. No sé si ha alcanzado ya la categoría de best seller, o está en ello, pero tiene todos los ingredientes para lograrlo, a saber:

  • Redacción facilona, de diario de adolescente (y eso que se supone que está escrito desde la perspectiva de una estudiante de literatura, que va a graduarse).
  • Protagonistas idilícos: los dos jóvenes y guapos.
  • Amor de "Cenicienta": ella es una estudiante con los recursos justitos, virgen, y una autoestima para hacérsela mirar. Él está podrido de pasta. Se conocen por una casualidad de esas tontorronas, y se quedan pillados hasta la médula al primer parpadeo.
  • Él tiene un problema, o varios, que aún no sabemos cuáles son, ni lo sabremos hasta las siguientes partes de la trilogía (50 sombras de Grey es solo la primera parte.)
  • Sexo, sexo y más sexo.
  • Amor empalagoso hasta chorrear.

Dicho lo cual, veamos lo que tiene de BDSM:
  • Un Amo. Ahí no entro en si es bueno o malo, que de eso hay para gustos. Eso sí, a E.L. James, la autora, se le escapa que en este mundillo, las palabras Señor y Amo van con mayúscula, cuando nos referimos a la persona Dominante.
  • Una mazmorra bastante apañadita, que ya quisiéramos unos cuántos.
  • Una historia de Dominación y... ¿sumisión?

Ana se ha enamorado del joven, guapo, multimillonario y Dominante Christian. Un flechazo, porque no lo conoce en un principio. Claro que, posteriormente, tampoco mejora la cosa: cuando habla de Christian, parece que solo le gusta lo guapísimo que es, lo bien que folla (lo siento, los que hayan leído la novela, saben que Christian no hace el amor) y, aunque parece que no, lo tremendamente rico que es. Digamos que, en este sentido, Anastasia evoluciona más bien poquito.

El tema central de la novela se termina reduciendo a que Anastasia (Ana para los amigos) a veces se ve como sumisa, y a veces no: ahora sí, ahora no, ahora sí, ahora no. Acabaríamos antes si pusiéramos a Ana a deshojar margaritas, y no gastábamos tanta página ni tiempo en ello.

Rescato del libro algunas descripciones en cuanto a sentimientos, porque me parece que la autora es certera cuando los explica. El ritmo de la narración es el adecuado, y consigue enganchar en ese sentido. Me gusta que no exista un baile infinito de personajes, que sean pocos y claros, bien definidos e independientes.

Christian tiene un pase como Amo; una puede estar de acuerdo o no con sus límites o con su manera de proceder, pero en mi humilde opinión, es el personaje más logrado, junto con Katherine, la amiga y compañera de piso de Ana. Sí podemos ver una evolución en el personaje de Christian, aunque en ocasiones sea brusca, sin transiciones, y sin qué terminemos de comprender muy bien por qué un personaje tan hermético como parece ser, tira la casa por la ventana en menos de una semana en cuanto a descubrimientos interiores. El amor funciona, pero en este tipo de personas no suele ser tan rápido.

Que absolutamente todo el argumento del libro gire en torno a si Christian y Anastasia serán pareja D/s al final, es cansino. Provoca que la mitad de las páginas sobren, que una termine saltándose sin pestañear renglones totalmente predecibles, y que piense en quemar los bites del libro antes de terminarlo.

Quizá soy demasiado exigente, pero algún día os hablaré de El Tutor, de Robin Schone, que sin ser una novela específica del género, es una preciosidad en cuanto a la descripción del proceso de Dominación/sumisión.






10 comentarios:

Maria dijo...

Me encanta leer, al fin!, alguna crítica,y me temo que dices bastantes verdades, aunque yo,todavía no he leido ni el primer libro pese a que tengo bajados los tres, pero no sé, me temo que no va a responder a las expectativas que levanta. Ya veré cuando lo lea,si es que lo hago, jejeje.
Saludos cordiales

Anónimo dijo...

Pues dudaba en si leerlo o no, pero con lo que dices, creo que va ser que paso de perder el tiempo, el que si me apunto es el del Tutor.

Gracias por tomarte la molestia de poner la critica ;)

Saludos

descalza dijo...

ohma, es fácil de leer, y algunos párrafos están bien, otra cosa es que merezca la pena como libro.

nim, de nada, es que me da mucha rabia cuando siento que me toman el pelo, y leyendo este libro, me he sentido así. Claro que, como siempre, es una opinión personal y por lo tanto, subjetiva.

Besos

Odri Overthetop dijo...

Pues mira, estoy totalmente de acuerdo contigo...es más, me he aburrido tanto que no me siento con fuerzas ni para el segundo. Mi amiga sialbeya (que ha ido de avanzadilla) y ya se lleyó los 3 me dice que el segundo es más de lo mismo y el tercero, infumable.

Besitos

descalza dijo...

Entonces me quitas las ganas de continuar la saga :D

Besos

carmesi dijo...

Muy de acuerdo con tus criticas.
Poco real me pareció pero como así son las novelas, idílicas...me lo he tomado como eso, una novela llena de fantasías.
Saludos

Unknown dijo...

Debo serte sincero, no he podido pasar de la página noventa del libro de cincuenta sombras, porque me parece que están pintando un bdsm artificial, materialista y de cuento de hadas. Lo considero un producto comercial y del marketing. Espero que esto sea como la klimtmanía que un día pase, y pase la vulgarización. Sublimes tu comentario.Te agradezco la recomendación de El Tutor.

Bastet dijo...

Hola preciosa

Al final entre tu y felina mala, voy a tener que leérmelos XDDDD tengo los 3 pero quería terminarme otra colección antes, pero me estáis poniendo los dientes largos XDDDDD

Un Lameton preciosa

Unknown dijo...

Muy buena la crítica! Si me permites, agregaría que el contrato que le da para firmar está sacado de alguna página de BDSM, pero que la autora no tiene la menor idea de qué significa, o al menos... no siente lo que escribe, porque este no es su mundo y no sabe transmitirlo.
Creo que al ser escrito en primera persona y en presente, le quita ritmo y sorpresa, porque no puede ir y venir en el tiempo.
Me resultó tan predecible y aburrido, que no pude terminarlo. Ni qué decir de leer el segundo!
Yo terminé de escribir el mío, que me ha llevado cuatro años escribir, y cuatro versiones. Pero... creo que vale la pena. Está ambientado en la Inglaterra de 1930, y estoy buscando una editorial que lo publique. Apenas lo logre, te avisaré.
Un abrazo...

Unknown dijo...

Pues no me lo he leído y me fio de tu criterio, ya suena más a cachondeo que otra cosa, coincide con la opinión de muchas más personas. Finalmente empiezo a sospechar que el tal Grey es el doctor Grey Jando Mor.
Saludos.